[Aviso para gente repelida por el sexo: en este artículo encontraréis un par de expresiones soeces relacionadas con el sexo]
O cómo descubrí que era demisexual.
Cuando era adolescente, podría haber pasado por una chica heterosexual normal y corriente. Quiero decir, las formas masculinas me parecían estéticamente atractivas, y no dudaba en comentar lo guapo que era un cantante cuando mis compañeras me enseñaban fotos. Claro, que ellas no podían dejar de hablar de las maneras en las que les gustaría tirárselo, mientras que a mí sólo me parecía agradable de mirar...
Y aquí entra otro detalle: yo no quería salir con los chicos que me gustaban. No deseaba hacer "cosas de parejas" con ellos, y ya ni hablemos de guarrerías (de hecho, me repugnaba). "¿Por qué no les pides salir?", me preguntaban mis compañeras, "Porque quieres salir con ellos, ¿no?". Y yo me quedaba como... Eh... ¿No? Sólo me atraían estéticamente, disfrutaba de su presencia.
Quiero aprovechar este momento para hacer una pausa y daros un consejo...
Nunca, JAMÁS salgáis con alguien por cualquiera de estos motivos: por pena, por aburrimiento, por no saber decir que "no", por olvidar a otro, o porque os sintáis obligados.
En fin... Un año después, empecé a salir con otro tío que estuvo metiéndome prisa para tener sexo a partir del tercer o cuarto día de estar juntos. Ese chico tampoco llegó a atraerme nunca de ninguna de las maneras posibles, aunque no tardé tanto en sentirme cómoda con él como con el anterior. Yo me limité a asumir que nunca encontraría a nadie que me atrajese del todo sexualmente, y que lo normal era conformarse con cualquiera que te hiciera disfrutar lo más mínimo.
Y os estaréis preguntando... ¿Cómo conseguí tener sexo con estas personas con las que no había formado ninguna conexión y hacia quienes no me sentía sexualmente atraída? Bueno, yo soy de esos pocos miembros del espectro asexual que disfrutan del sexo y a quienes les gusta practicarlo, sin importar que no nos sintamos atraídos hacia la persona con la que nos estamos acostando. A pesar de ser demisexual, soy bastante libidinosa, y considero el sexo uno de los mayores placeres de mi vida.
Y os estaréis preguntando... ¿Cómo conseguí tener sexo con estas personas con las que no había formado ninguna conexión y hacia quienes no me sentía sexualmente atraída? Bueno, yo soy de esos pocos miembros del espectro asexual que disfrutan del sexo y a quienes les gusta practicarlo, sin importar que no nos sintamos atraídos hacia la persona con la que nos estamos acostando. A pesar de ser demisexual, soy bastante libidinosa, y considero el sexo uno de los mayores placeres de mi vida.
Hasta el año pasado, seguía pensando que sólo era una tía heterosexual exigente. Ya había escuchado el término "demisexual" hacía tiempo, pero entonces descubrí que los demisexuales forman parte del espectro asexual, y yo, consciente de mi desbordante apetito sexual, me alejé del término; no me gusta apropiarme de etiquetas que no me definen. Sin embargo, seguí investigando. Acerca de la demisexualidad, y acerca de lo que realmente es la asexualidad (ya que, al igual que muchos, yo creía que significaba "aversión por el sexo").
Soy demisexual. Demi-heterosexual y demi-heterorromántica, para ser más exactos, ya que la persona con la que estoy ahora, la única en mi vida por la que me he sentido sexual y románticamente atraída, es un hombre.
¡Ojo! Y aunque antes dije que soy capaz de "disfrutar" del sexo sin vínculo, ahora que lo he probado con vínculo y atracción, puedo asegurar que prefiero de lejos el sexo con una persona con la que he conectado al sexo sólo por placer. Este último me resultaba tan... Vacío, no sé. Aburrido...
¿Por qué he escrito todo esto? ¿Por qué he creado este blog? Porque estoy cansada de leer artículos acerca de la demisexualidad escritos por personas que no son demisexuales, ni pertenecen al espectro asexual o arromántico. Además, los publican en blogs frecuentados por gente no asexual, de modo que los comentarios que se suelen leer en respuesta a dichos artículos son del tipo "Se inventan nombres para todo", "Se creen especiales", "Los demisexuales sólo son muy selectivos", "Los asexuales están enfermos"... ¡Y ya está bien!
¡Este es un blog escrito por una persona demisexual para individuos demisexuales y/o demirrománticos!
Por eso os digo, amigas y amigos míos, que si después de leer esto tenéis sospechas de que sois demisexuales, no le restéis importancia. No penséis que sólo sois personas heterosexuales exigentes. Informaos. Investigad. ¡Cuestionadlo todo! No borréis vuestra propia identidad, en serio.
Y vosotros, ¿cómo descubristeis que eráis demisexuales? ¿Cuál es vuestra historia? ¿Se parece a la mía?